Estás contento. Llegas a tu casa luego de la entrevista convencido de que lo hiciste muy bien. Te sentiste a gusto con el entrevistador y el proyecto te motiva… pero empiezan a pasar los días y no tienes noticias.
Sin que lo puedas evitar, llegan los nervios y la incertidumbre. En Talento BuenTrabajo te explicamos cómo actuar en caso que hayas tenido una buena entrevista laboral pero hasta el momento no te han vuelto a contactar.
¿Estás seguro de que has hecho lo correcto como candidato? Traemos una serie de recomendaciones para que aprendas a tomar la iniciativa y neutralizar el sentimiento de duda que te invade. ¡No te desanimes!
Las razones por las cuales no se contactan contigo con posterioridad a la realización de la entrevista laboral pueden ser diferentes:
– El reclutador está analizando entre varios candidatos, la mejor opción.
– El proceso no ha terminado, se ha pospuesto o ha finalizado.
– El personal con el que te has contactado se encuentra de vacaciones o está ocupado.
– Tu información de contacto es errónea.
– Han elegido a otro candidato que se adecúa mejor a la oferta.
Sin embargo, no te quedes con la duda. Por eso, más allá de las razones que ocasionan el silencio luego de una entrevista laboral, queremos darte una serie de consejos para que sepas cómo actuar ante esta situación.
1. Toma la iniciativa y contacta con el reclutador:
Si han pasado al menos una semana desde que tuviste la entrevista, es momento para que te contactes con la persona con quien tuviste la entrevista. Lo más aconsejable es hacerlo por medio de un correo electrónico.
Pero ¿qué decir? es importante que, en primera instancia, agradezcas por el tiempo brindado. Así mismo manifiestes expresamente el interés por formar parte del equipo de trabajo de la compañía. Además, recalcar que posees las herramientas y capacidades pertinentes para desarrollar el cargo al que te postulaste.
También puedes preguntar por el estado de la vacante. En el caso que ya esté cubierta, solicita una retroalimentación de tu proceso para mejorar en futuras oportunidades. Recuerda siempre dejar las puertas abiertas.
2. Evita que el reclutador se sienta presionado:
Teniendo presente la recomendación anterior sobre el tomar la iniciativa con relación al proceso de reclutamiento… ¡Ten cuidado! Es imprescindible que esta manifestación de interés no se confunda con presión hacia el reclutador. Siempre con educación y empleando un lenguaje adecuado, podrás hacerlo sin inconvenientes.
En caso de no obtener una respuesta de tu correo, no descartes la posibilidad de realizar una llamada, tras haber pasado 48 horas al envío de tu correo. En efecto, si el postulante no ha sido seleccionado, tu insistencia no modificará la decisión por parte del reclutador. Sin embargo, si existen otros motivos por los cuales no se ha contacto con el entrevistado, la recepción de tu correo o tu llamada telefónica pueden generar un mayor nivel de visibilidad y acelerar el proceso.
En resumen y para tener en cuenta siempre: puedes expresarte adecuadamente, mostrar interés, manifestar tus capacidades para el puesto, pero no le exijas al empleador. Como diría Aristóteles, “el punto medio siempre es el mejor equilibrio para alcanzar la excelencia”.