Los tiempos promedios de los procesos de búsqueda de empleo varían considerablemente por varios factores que los afectan tales como el perfil del trabajador, la época del año, el campo de búsqueda y la demanda geográfica de personas con nuestras habilidades.

En campos no muy especializados las búsquedas suelen ser de 3 meses, cuando son muy exitosas. Esto se debe a que 3 meses es el tiempo promedio que tarda una compañía en darse cuenta que necesita contratar a alguien, entrevistar a los posibles candidatos, hacer una oferta salarial atractiva y realizar la contratación.

Otros elementos que pueden afectar el tiempo promedio para la consecución de trabajo son la falta de experiencia y la expectativa de salario. Cuando se está en la búsqueda de un empleo debemos tener bastante claro cual es el salario que esperamos recibir, este no debe ni apuntar a un sueldo soñado, ni tampoco a una remuneración con la cual no podamos vivir.

Esta recomendación se debe principalmente a que este es un punto de referencia para los empleadores, pues sirve de guia para eliminar empleados que se salen del rango salarial que tienen estipulado para ese cargo.

Un elemento que puede ayudarnos a reducir los tiempo de búsqueda de empleo son nuestras redes de conocidos. La razón de esto radica en que la publicidad voz a voz siempre suele ser la mejor y cuando la referencia viene de alguien cercano a quien está empleando tiende a tener un mayor impacto.

Así mismo los factores geográficos pueden ser un impedimento para una rápida consecución de empleo, por lo cual siempre es más recomendable vivir en zonas donde nuestras habilidades específicas sean necesitadas constantemente.

Por otra parte no debemos preocuparnos si nuestra búsqueda de empleo se demora más de lo debido, pues estos son procesos largos con muchas intermediaciones. Las personas en búsqueda de empleo deben visualizarse en los zapatos del empleador y conocer los números detrás de cada oferta laboral, pues una sola vacante tiene implícito cerca de 50 aspirantes, de los cuales se depura un 80% en las hojas de vida y un 10% extra en llamadas telefónicas.

Al final solo un 5% de quienes están interesados en un puesto llegan a conseguir una entrevista, la cual reduce más aún el número. Aunque muchos creen que la entrevista es el inicio de un procesos de selección laboral, esta es casi uno de los últimos pasos, por lo cual no llegar hasta allí no es tan malo como lo perciben.

No es extraño que buscar un empleo sea demorado, pues es un largo proceso que debemos encarar de la mejor manera, eso si, sin nunca perder el ánimo.