No existe una formula mágica para encontrar trabajo, sin embargo, las ganas de ser el mejor candidato llevan a muchos profesionales a mentir o exagerar sobre sus conocimientos, logros y experiencias sin saber que cometen un grave error.

¿Por qué las mentiras nunca te ayudarán a encontrar trabajo?

Dilatan tu búsqueda: cuando te presentas a vacantes para las cuales no estás realmente capacitado, estás perdiendo el tiempo y dejando pasar opciones que se adecuan más a tu perfil profesional.

Si lo consigues, no será estable: Aunque logres ingresar a una empresa con mentiras, tu desempeño dirá la verdad y probablemente seas despedido en poco tiempo.

Las mentiras pueden llevarte a situaciones peores: si bien estar sin trabajo es complicado, lo será aún más en el caso de que te lleves un cargo legal por falsificación de documentos o hablar sobre estudios que no finalizaste.

Todo se descubre: aunque no te digan la razón, las mentiras pueden hacerse evidentes muy fácilmente. Probablemente te dejen esperando una llamada que nunca llegará ya que nadie quiere contratar a una persona deshonesta.

• Preguntas cruzadas: te harán la misma pregunta desde otro angulo para evaluar tu respuesta.
• Profundidad del detalle: te preguntarán más a fondo sobre detalles de algún proceso o lugar que aparezca en tu hoja de vida.
• Realización de pruebas: las pruebas de conocimiento pondrán en evidencia lo que puedes y lo que no puedes hacer.
• Confirmación con terceros: los reclutadores acudirán a otras fuentes para confirmar la información brindada por los postulantes.

Recuerda que los reclutadores están ahí no solo para evaluar tu idoneidad para el puesto por medio de tus conocimientos, también estarán dando un vistazo a tu personalidad y qué tanto encajarás con el equipo de trabajo. Siendo honesto y mostrándote tal cual eres, no solo les ayudas a ellos, también a ti mismo, para acceder a una vacante en la cual tengas el potencial de tener una estabilidad laboral y crecimiento profesional.