Además de ser un momento para bajar la intensidad del trabajo, las pausas activas mantienen protegido el personal de las empresas.

Con una cifra cercana al 38 % de trabajadores que se ven afectados por estrés laboral, las pausas activas son una respuesta que desde 1950, ha sido establecida por la OMS y la organización mundial del trabajo como un mecanismo para cuidarlos.

Las pausas activas también, son una manera tácita de promover el movimiento en el cuerpo, evitando el sedentarismo, enfocada a mejorar la movilidad articular mientras se realizan ejercicios que propicien un cambio de consciencia acerca de la posición.

De acuerdo a los especialistas, es necesario hacer pausas dos veces al día, en un lapso de 9 a 10 minutos para “acomodar” el cuerpo de nuevo, sin embargo si la persona tiene alguna prescripción médica puede tomar algunos minutos de su jornada para hacerlas cada hora.

Beneficios de las pausas activas:

Como primera medida las pausas disminuyen el estrés, favorecen el cambio de posturas y rutina, mientras liberan estrés articular y muscular.

A su vez esta clase de actividades estimulan y favorecen la circulación del cuerpo, mejorando la postura frente al computador, favoreciendo notablemente la autoestima y capacidad de concentración.

En la parte social, las pausas son un iniciador de conversación, lo cual favorece las relaciones interpersonales, logrando un clima laboral más propicio.

Algunos ejercicios sugeridos:

Bajo la supervisión de un profesional y teniendo la mayor precaución posible se pueden hacer ejercicios como:

Girar la cabeza hacia la derecha y luego a la izquierda

Inclinar la cabeza hacia adelante y atrás

Encoger los hombros hasta las orejas

Estirar las manos, sujetándolas suavemente de las palmas

Realizar movimientos circulares de cadera, tobillo, rodillas y tronco.

Consigue siempre los candidatos más calificados, ingresando tu empresa y sus vacantes en buen trabajo