Durante una entrevista de trabajo o luego de ella, hay algunas señales que te pueden indicar que algo no está bien y, casi puedes asegurar, que el puesto no será tuyo, si quieres aprender a reconocerlas para saber cómo remediarlas antes de que sea demasiado tarde, o, no esperanzarte en una opción de empleo que no es para ti, sigue leyendo:

Poca profundización en tus respuestas

Si el entrevistador comienza a hacer preguntas superficiales y luego de tus respuestas no indaga más sobre el tema, puede significar que no le interesa tener información adicional sobre tu perfil pues ya decidió que no eres la persona idónea para el puesto.

Cómo solucionarlo: Debes estar atento al punto en el que pierdes el interés de tu entrevistador e intentar explicar, en otras respuestas, la razón de aquella información que pudo mal entenderse o desviar su atención.

No intentan mostrarte las ventajas del puesto

Si luego de un rato de entrevista el encargado no te habla sobre las condiciones de la vacante, el ambiente laboral o ni siquiera toca el tema de cómo funciona tu área, es probable que no le interese venderte la vacante pues no eres la persona que busca.

Cómo solucionarlo: En estos casos es bueno preguntar al entrevistador si quisiera saber un poco más de tu perfil o tus logros en temas afines a la vacante, esto podría volver a despertar su interés en ti para el puesto.

Te deja hablar sin límite

Si eres tomado como un hablador de seguro tu entrevistador te permitirá serlo, para luego descartarte de inmediato.

Cómo solucionarlo: Intenta no llegar a ese punto, si bien tus respuestas deben explicar temas importantes de tu experiencia u objetivo, no debes irte demasiado a los detalles a menos que te lo pregunten.

No le interesa tu disponibilidad

Si luego de una (aparentemente) buena entrevista, el encargado no te pregunta sobre tu disponibilidad o tu aspiración salarial, tal vez sea porque ya no te encuentras en su lista de opciones para continuar el proceso de selección.

Cómo solucionarlo: Haz seguimiento al proceso, la persistencia e interés pueden volver a incluirte en esa carta de opcionados a seguir participando en la elección del mejor candidato.

La entrevista de trabajo es muy corta

El tiempo de entrevista nos habla mucho del interés de la compañía por tenernos en su lista de empleados, si una entrevista de trabajo es muy corta, quiere decir que la información que tienen sobre ti no es llamativa y has sido descartado del proceso.

Cómo solucionarlo: Si ves la intención del entrevistador de finalizar la entrevista, propón pro activamente mostrarle tu portafolio o algo más que de fe de la calidad de tu trabajo.

Sabemos que no en todos los casos es sencillo salvar una entrevista, es por ello que, para casos en los que definitivamente el puesto no sea para ti, es bueno que reconozcas estas señales y desistas del puesto, para ir tras opciones que se adapten más a tu perfil.