Iniciaste un negocio propio en el que invertiste un montón de tiempo y dinero, sin embargo no funcionó y te encuentras de nuevo sin ingresos y buscando trabajo, no sabes por qué no ha salido bien si tenias muchas ganas de ser independiente.
Aquí te contamos sobre 5 errores comunes que son asesinos innatos de proyectos de emprendimiento.
Falta de dinero
Al iniciar un negocio no se necesita disponer únicamente de unos activos materiales, un lugar de trabajo y “un computador”, al hacer un presupuesto inicial recuerda incluir: servicios públicos, implementos de oficina, un salario para ti y las personas que vayan a ayudarte al inicio (suficiente para al menos 3 meses), dinero extra para imprevistos… En fin, debes dedicar un buen tiempo a elaborar un presupuesto detallado y pensar en todo para que no te quedes sin recursos a mitad de camino.
Falta de experiencia
A todos nos han vendido el sueño de ser independientes (lo cual no está nada mal) pero en ese afán de lograrlo y tener el deseo de no trabajar para otros nos apresuramos sin darnos cuenta de que esto nos llevará directo a la ruina. Si tienes una idea de negocio intenta conseguir trabajo en una empresa afín a lo que quieres lograr, así conocerás su funcionamiento interno, cómo se manejan ciertas situaciones e incluso proveedores o los procesos de obtención de nuevos clientes.
Falta de planeación
Si comienzas tu negocio y empiezas a notar cuantos pormenores no tomaste en cuenta para su correcto funcionamiento, estás destinado por adelantado al fracaso. Es fundamental crear un plan detallado de lo más minucioso a los procesos globales para no toparte con fallas cruciales en el camino. Fija especial atención en la logística tanto interna como en los canales de distribución y recuerda que una empresa no es solo un lindo logo, una página web o un par de estantes sofisticados.
Pensar que es fácil
Este es un gran error, por más que pienses en hacer algo simple, un negocio propio siempre requiere mucho trabajo, esfuerzo y disciplina. Debes exigir más del 100% de tu potencial para hacer que las cosas funcionen. Pasarás días sin dormir, trabajarás turnos dobles y muchas veces tendrás que ser el “todero” de tu empresa… en esos casos lo mejor es pensar que los sacrificios tendrán su recompensa.
No esperar lo suficiente
Un nuevo negocio comenzará a dar rendimientos aproximadamente un año después de su creación. Se cauteloso con el uso del dinero, ocúpate de pagar las deudas que hayas podido adquirir para iniciarlo y todas tus obligaciones fijas (arrendamiento, servicios, etc), luego de esto normalmente quedará una muy pequeña porción como utilidad y muchas personas creen que el negocio no es rentable, podía serlo pero no esperaron lo suficiente, perdieron su tiempo y esfuerzo.
Por último, recuerda que la fuerza que impulsará tu idea es creer en ella. Trabaja duro y ahorra antes de iniciar tu propio negocio pues este proceso te llenará de experiencia y conocimientos muy útiles a la hora de comenzar tu emprendimiento.
Comienza tu camino al emprendimiento con un buen trabajo, si no tienes uno déjanos tu hoja de vida haciendo clic aquí y te ayudaremos a encontrarlo.