Para iniciar tu vida laboral y empezar a acumular la experiencia necesaria para desempeñarte en cargos avanzados es importante que te perfiles dentro de tu área de estudios hacia lo que realmente quieres hacer, de este modo, con tus primeros empleos ganarás conocimientos valiosos para tu perfil profesional y, a lo largo del tiempo serás el mejor en el área por la que has decidido inclinarte.

Ten en cuenta las siguientes recomendaciones tanto para armar tu hoja de vida como para mostrarte a ti mismo en las entrevistas que consigas:

Céntrate en lo que tienes

Si no tienes experiencia no te refieras a ello, mucho menos presentes una hoja de vida prediseñada con este campo vacío. Diseña tu propio currículum y enfócate en tus estudios y lo que quieres poner en práctica.

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¿Qué ofrezco yo a la compañía? Aunque suene complicado puedes pensar en tus conocimientos, entrega al trabajo, ganas de trabajar y poner en práctica lo que sabes… en fin, busca un diferenciador y hazlo resaltar por sobre tu falta de experiencia.

Ser joven no es malo

Has de tu edad una ventaja: por tu edad tienes más conocimientos sobre las nuevas tecnologías, manejas programas de diseño o herramientas online que otras personas podrían no conocer, tienes ganas de trabajar y no tienes obligaciones (como hijos o la renta) que te quiten la tranquilidad para concentrarte en hacer bien tu trabajo. Aquí también puedes resaltar tu capacidad de adaptación a diferentes situaciones o entornos.

Un portafolio

Si te desempeñarás en áreas que lo permitan, realiza un portafolio, aunque este no contenga trabajos para clientes reales, céntrate en mostrar lo que puedes hacer, lo que sabes y tu manejo de herramientas.

Evita las referencias familiares

Si has trabajado en un negocio familiar pequeño, puede que hayas aprendido muchas cosas, pero no lo incluyas en tu currículo pues solo hará hincapié en la falta de experiencia que tienes en el área laboral real. Puedes hablar de esto en tu entrevista si lo deseas, apuntando a esas experiencias (no laborales) de las cuales has aprendido: viajes, cursos, etc.

Ante todo, siéntete (y muéstrate) seguro de lo que sabes, no dudes de tus capacidades y de todo aquello que tienes para ofrecer a esa nueva empresa en la cual deseas trabajar.

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