La mayoría de trabajos requieren que estemos sentados durante largas jornadas. Esta posición conlleva altos riesgos para la salud, por lo que es importante mantenernos activos.
Varias investigaciones han demostrado que el permanecer sentados durante tiempos prolongados, está relacionado con la obesidad, y con enfermedades cardíacas.
También retrasa el metabolismo, lo que tiene un impacto en la capacidad del cuerpo para regular la presión sanguínea y el azúcar en la sangre, así como para descomponer la grasa corporal.
Por eso la importante de introducir un poco de actividad física en el día de trabajo.
Y… ¿cómo podemos estar activos cuando se trabaja en un escritorio de 7 a 10 horas al día? Parece un desafío, pero en BuenTrabajo te damos 5 pasos sencillos para lograrlo.
1. Ir en bicicleta o caminando al trabajo
Esta opción dependerá mucho de la ubicación de nuestro trabajo y de lo lejos que esté de nuestra casa. Pero debemos intentar cambiar la forma en que nos movemos todos los días.
Dejar el carro al menos un día de la semana en el parqueadero e ir caminando o en bici a la oficina, es una buena alternativa.
Ir en bicicleta al trabajo está relacionado con un menor nivel de estrés. También, con el tener una mejor actitud para empezar el día y con menos tiempo perdido en los desplazamientos. Llegar a tiempo…
Esta actividad como el caminar, se han asociado también a un menor riesgo de enfermedad cardiovascular. Además, quienes caminan o van al trabajo en cicla tienen un índice de masa corporal (IMC) y un porcentaje de grasa más bajos… en comparación con quienes viajan en carro.
Te puede interesar ¿Te gustaría tener un nuevo trabajo? Hay lugares en los que puedes ir en bicicleta
2. Ponte de pie regularmente
Es simple. Ponerse de pie de vez en cuando mientras estamos en el trabajo. Pero a veces lo olvidamos, y podría ayudar a frenar los riesgos relacionados con la salud al estar sentados durante demasiado tiempo.
Para reducir el sedentarismo, un equipo de expertos publicó una guía en el British Journal of Sports Medicine. Se concluyó que los empleados de oficina debían permanecer de pie durante al menos 2 horas, para romper la sesión prolongada.
Se cree que incorporar en las oficinas, mesas de trabajo altas o escritorios de pie, podría ser más factible para mejorar la salud de los trabajadores, que el mismo ejercicio dirigido.
3. Muévete más
Moverse más puede parecer una acción obvia para ser menos sedentario. Pero cuando nos encontramos en las profundidades de un proyecto, es fácil pasar muchas horas sentados sin darnos cuenta. Para evitarlo, sube y baja las escaleras en vez de tomar el ascensor.
Estudios médicos y científicos, han encontrado que por cada hora extra de estar sentado después de más de 5 horas, el tamaño de la cintura aumenta en 2 centímetros y el riesgo de enfermedad cardiovascular en un 0,2%.
Incluso cuando estás sentado no necesitas estar totalmente quieto. Moverse en el asiento o levantar las piernas, también podría marcar la diferencia. Dichos movimientos contrarrestan algunos de los efectos adversos de permanecer sentados.
4. Mejorar el entorno laboral
Incorporar actividad física en nuestro día laboral tiene numerosos beneficios para la salud.
Algunas empresas ya ofrecen: clases de estiramiento o pausas activas, clases de yoga durante el horario de oficina y grupos para correr a la hora del almuerzo. Estas actividades ayudan a los trabajadores a cuidar de su bienestar y aumentar la eficiencia en su trabajo.
Un buen entorno laboral no sólo ayuda a que los trabajadores pierdan peso y grasa corporal. También sirve para que los ingresos de la compañía aumenten casi un 10%.
5. Cuida el almuerzo/comida
En lugar de almorzar delante del computador mientras revisas el celular y contestas correos electrónicos, tómate un descanso y haz algo físicamente activo.
Regresarás al trabajo sintiéndote renovado, vital y más capaz de concentrarte por el resto del día. En tu espacio de almuerzo puedes realizar distintas actividades que te ayuden a motivar para las horas que te quedan antes de salir de vuelta a tu casa.
No importa cómo tratemos de mantenernos activos durante el día de oficina. Lo importante es recordar que cualquier movimiento, aunque solo sea por 10 minutos, es mejor que permanecer quieto y no moverse en todo el día.