A pesar de que estamos buscando un empleo y lo hacemos porque necesitamos un ingreso fijo. Muchos comienzan su búsqueda parafraseando a Los Fabulosos Cadillacs con un “no me importa el dinero” o a los Rolling Stones con algo así como “i want more satisfaction”, pues lo que buscan es una carrera que los llene de orgullo.
Hace un tiempo se mostraron estudios que daba na conocer los nombres de los trabajos que más llenaban de orgullo, entre ellos el de párroco lideraba la lista junto a ejecutivos de cuentas bien pagos, artistas y educadores.
Pero que es en sí lo que hace que un trabajo sea reconfortante y nos llene de ganas de seguir día a día asistiendo sin tener descargo alguno.
Algunos apuntan a que la construcción de relaciones es una de las partes mas importantes de su labor diaria y que es por ello que lo continúan haciendo, dentro de este tipo de trabajos cuyo plus es la interacción se teje un respeto a las personas, no por su posición de autoridad, sino por sus calidades humanas y conocimiento.
De esta manera es que muchas personas deciden mantener en cargos durante largas temporadas pues han encontrado una cómoda posición donde se sienten reconocidos.
Por otro lado hay quienes prefieren sentirse altruistas en su posición laboral, personas como bomberos, profesores, terapeutas físicos todos tienen en común que son profesiones que se deben a ayudar a los demás y eso puede ser un gran plus en cuanto a la satisfacción que tengamos sobre lo que hacemos.
Entre tanto existe otro gran grupo que prefiere hacer lo que aman y hacen bien. Cuando se tienen habilidades especiales para realizar algo es muy probable que eso nos de cierto tipo de alegría, mucho más cuando eso hace parte de nuestra pasión, pues como se dice “trabaja en lo que amas y nunca tendrás que trabajar un sólo día en tu vida”
Así que Los Cadillacs tenían razón, incluso los apoyan publicaciones como el Harvard Business Review, el cual en su estudio sobre lo arrepentidas que estaban las personas tras aceptar un empleo que dejaron prontamente fue liderado por la contundente frase “ojalá no lo hubiera aceptado por el dinero.
Por lo cual aunque el salario es parte importante y casi vital, una vez pagadas las cuentas esenciales y tener algo extra para algún gusto nuestro foco se vira hacia otros horizontes, de manera que si lo que buscamos es felicidad en el trabajo debemos poner atención en estos otros elementos.