Estas historias son de no creer, pero por esto fue que ellos consiguieron empleo.
Por comer galletas
Estaba tremendamente nervioso en la entrevista para creativo, por un momento mi creatividad fallo al ver a la cara al entrevistador quien era el dueño de la empresa y mi mente quedo en blanco. Eso es lo peor que podría pasarle a alguien que intenta ser creativo.
Es entonces cuando llegamos a las preguntas acerca de mi, exactamente aquella de “Cómo se describiría a si mismo”, tartamudeaba mucho pero logre articular unas palabras y lo único que me llego a la mente fue que tenia ganas de galletas, así que mencione algo como “Soy alguien calmado, con cabeza fría, mis hobbys son la ilustración y soy comedor de galletas semiprofesional desde 2008”.
Al escuchar una presentación así mi entrevistador no pudo sino reír, su semblante cambio y el resto de la entrevista la pasamos hablando sobre galletas y perspectivas de trabajo. Creo que eso fue lo que le dio la mejor impresión e hizo que me tuviera en su mente a la hora de decidir a quien contratar.
Porque todos llegaron tarde
Salí muy temprano para la entrevista de trabajo en un proceso de selección laboral que ya llevaba varias semanas. Previendo que iba a llover y el tráfico se haría imposible, me adelanté y llegué mucho antes de lo previsto y me senté solo en la sala de espera mientras era el momento de encontrarme con la persona de recursos humanos.
La sala de espera siempre estuvo sola, así que me asusté pensando que esa no era la dirección o que la hora había cambiado, pero cuando ya llevaba un rato allí me llamaron a seguir. Ya casi finalizaba la jornada laboral y se notaba que había algo de afán entre quienes se encontraban aun laborando ese viernes.
Presente la entrevista y una prueba corta sin ver algún otro candidato, y al finalizar termine caminando hacia afuera con la persona que me entrevistó pues también se encontraba de salida. Ibamos hablando sobre temas diversos cuando en la entrada del edificio pasamos al lado de 4 personas mojadas hasta más no poder.
Tiempo después me enteré que esas personas eran los otros candidatos y que habian llegado más de una hora tarde por el tráfico y la lluvia torrencial. Al parecer ese día el clima y la ciudad jugaron a mi favor pues me llevé el puesto.
Porque era buena onda
En la última entrevista solo quedábamos dos candidatos y tras un rato sentados esperando comencé a conversar con el que era mi adversario por la vacante. Encontré que el tenia mi mismo nivel académico y experiencia laboral así que debía mostrar algún diferenciador.
En la entrevista con el que sería mi jefe directo fue lo menos tímido y le hable sobre mis gustos y pasatiempos enfatizando en aquellos que compartía con el entrevistador, hasta que tocamos el tema del fútbol y logramos hablar casi 10 minutos de ello.
Al final terminaron contratándome, pero tiempo después me enteré que mi jefe me contrató a mi sobre el otro candidato porque yo le parecía “buena onda”.
Porque ninguno aceptó
Otra vez mas recibía un correo diciéndome que gracias por haber participado de la selección laboral, ya llevaba 4 meses de desempleo y la situación nunca parecía mejorar, pero aun así no perdía el ánimo.
Decídi entonces alejarme un poco del drama del desempleado y visitar por unos días a unos familiares, cuando al poco tiempo recibo una llamada diciéndome que había obtenido el puesto. Pensé que era una broma de algún amigo pues ya había recibido confirmación por correo electrónico de que no era así.
Al final les dí el beneficio de la duda y terminó siendo real. Me devolví+í antes de lo previsto pues me necesitaban para realizar el papeleo y acepte el empleo ya que lo necesitaba y las condiciones laborales se ajustaban mucho a mis horarios de estudio.
Poco tiempo tras entrar y por una amiga que hice en el área de contratación me enteré que habian varios candidatos que habían sido seleccionados antes que mi, pero que terminaron declinando fuera por la oferta laboral o porque el horario no les convenía.