No todos los profesionales sienten orgullo de lo que hacen, pero ese no es el caso para los periodistas pues son personas dedicadas con pasión por escribir e investigar, cuya frente en alto se muestra cada vez que cumplen con el deber de informar a los demás.

Aquellos periodistas que exponen las verdades, que van en búsqueda de una historia, que se ponen en peligro a si mismo y que nos dan la información que necesitamos al instante son todos reconocidos este 9 de febrero en un homenaje de quienes conocen que esta profesión, siendo una de las de mayor riesgo en el país, es la que trae grandes satisfacciones personales.

No es gratuito que se diga que esta es una de las profesiones más peligrosas, puesto que según datos de la Fundación para la Libertad de Prensa en solo el 2015 se registraron se registraron 147 ataques que dejaron 232 periodistas víctimas, lo que representa un incremento del 39% con respecto a lo visto en 2014.

De esos 152 casos de periodistas, 74 casos han prescrito. Solo en 2015 cuatro procesos se vencieron para la justicia colombiana, llevando la impunidad como común denominador en esta situación. Pero aún ante este panorama gris los periodistas siguen fieles a sus ideales.

Hace décadas Bill Kovatch y Tom Rosenstiel condujeron uno de las investigaciones sociales que marcaría el norte en el quehacer de esta profesión, encontrando las verdaderas raíces de lo que es ser un periodista y las obligaciones que se contraen al aceptar esta noble profesión.

De las conclusiones que encontraron, se observó que el compromiso real del periodismo no es ni con los dirigentes de su cadena, ni con su público, nisiquiera con ellos mismos, sino con la verdad. Esto nace de la concepción que mientras se hable la verdad es periodismo, pero si se aleja de ella es ficción.

En la misma libertad de prensa se fundamenta la libertad de los pueblos, incluso en países como Estados Unidos uno de los primeros derechos que se reglamenta es el de la libertad de expresión y por ende el ejercicio periodístico como base fundamental de la constitución.

Es por esto y más que a nuestros amigos periodistas debemos agradecerles en su día, pues mas que un trabajo lo que hacen es una labor social que nos afecta a todos nosotros pues nos garantiza uno de los mayores beneficios, asegurar nuestra libertad.