Lo más sano de un trabajo es que te brinde las condiciones de bienestar y que no invada tus actividades en otros entornos como familia y amigos. Aprende a separar ambos roles con estos consejos:
Cuando llegues a casa, ¡ desconéctate!
Ningún trabajo es productivo si luego de una larga jornada, aún sigue pendiente . La capacidad de organización de tareas es lo que te permite terminar cada día con la satisfacción de lo realizado. De ninguna manera permitas que se vuelva repetitivo el tener que realizar trabajo extra en tus horas de descanso y más aún si tienes más obligaciones en el ámbito personal. Define los tiempos desde que comienzas una relación laboral. Ingresa aquí y encuentra nuevas oportunidades.
Evita distracciones en el trabajo
Una de las causas por las que no alcances a terminar tu labor, puede ser las continuas interrupciones que te alejan de tu objetivo. Si pasas el día completo en reuniones, seguramente el tiempo para ejecutar va a ser muy corto. El tiempo del ‘break’ es necesario, pero no puede extenderse demasiado. Organiza muy bien tus tiempos productivos. Encuentra el trabajo de tus sueños aquí.
Agenda actividades personales
Algunas personas tienen la tentación de mirar su correo empresarial en sus tiempos libres. Tienes que pensar en otras cosas que te motiven y te brinden bienestar como: Hacer ejercicio, realizar alguna actividad de ocio, compartir con alguien o simplemente descansar. Aquí esta el trabajo ideal para ti.
Sólo contactos personales en tus redes sociales
Lo que se publica en redes sociales puede ser el rumor de pasillo en la oficina. Evita involucrar al personal de trabajo con información sobre tu vida personal, a menos que se trate de personas que se hayan ganado con méritos tu entera confianza, para compartirles tus cosas en un nivel diferente.
¿Y si trabajas con tu pareja?
No lleves los conflictos de casa a la oficina ni viceversa. Dedica tiempos diferentes para alimentar la relación, lejos de la rutina del trabajo. Entra aquí y empezarás una nueva vida laboral.